Es conocida la relación entre la vitamina D y el metabolismo óseo.
Quizás menos conocida sea la influencia que esta hormona (mal llamada vitamina) en otras funciones corporales .
Existen receptores para vitamina D en múltiples órganos y tejidos además del óseo, y se ha implicado en diferentes enfermedades y sintomas.
Asi, se ha relacionado la deficiencia de vitamina D en la patogenia de la esclerosis múltiple, por su efecto inmunitario, en miopatias , en dolor crónico, fibromialgia, enfermedad de Parkinson, Alzheimer..
También parece tener un efecto cardioprotector y antiinflamatorio implicandose en enfermedades como la artritis reumatoide o la diabetes.
La vitamina D puede sintetizarse en nuestro organismo pero a dosis muy bajas para nuestras necesidades por lo que dependemos de ella tambien de la dieta.
Problemas digestivos que dificulten su absorcion, problemas hepáticos, renales o falta de exposición solar hacen posible su deficiencia.